La operación del ligamento cruzado anterior es una cirugía cuyo objetivo es reconstruir el ligamento roto fabricando un ligamento nuevo a partir de un injerto.
El ligamento cruzado anterior es un ligamento con escaso potencial de cicatrización, por lo que una vez roto la reparación tiene pocas posibilidades de éxito, de tal forma que la reconstrucción es a día de hoy, la mejor técnica quirúrgica.
Para reconstruir el ligamento cruzado anterior tenemos distintos tipos de injertos:
- Autólogos, son ligamentos que se obtienen del propio cuerpo del paciente siendo los más frecuentes:
- Isquiotibiales de la misma rodilla, es la técnica más habitual debido a su pocos riesgos y buena funcionalidad.
- Tendón rotuliano, también llamado Hueso tendón hueso (HTH), además de tejido tendinoso se obtiene un poquito de hueso de la rótula y de la tibia. Sus principales inconvenientes son: Posibilidad de fractura de la rótula o la tibia en la extracción, dolor anterior de rodilla postquirúrgico o fallos en la sujección de la plastia. Como ventajas tenemos que al obtener una pastilla de hueso la integración del nuevo ligamento es más rápida y además permite solucionar problemas de stock óseo, lo cual la hace una opción ideales en revisiones, es decir en pacientes ya operados que tenemos que fabricar un ligamento cruzado anterior por segunda vez.
- Tendón cuadricipital, se obtiene un trocito del polo superior de la rótula junto a parte del tendón rotuliano, una opción usas recientemente que aporta ventajas del HTH, minimizando los riesgos.
- Heterólogos, injertos de pacientes donantes (cadáver) se obtienen de muchas localizaciones. Permiten minimizar los riesgos de extracción sobre el paciente y planificar de antemano las características del injerto, como contrapartidas tenemos: Las tasas de re-rotura de las reconstrucciones con injertos de cadáver son superiores a los injertos heterólogos, el coste económico y la posibildiad de transmision de enfermedades, que ha día de hoy es muy bajo. Habitualmente usados en pacientes de baja demanda y revisiones.
¿Cómo se realiza la operación de ligamento cruzado anterior?
La operación de ligamento cruzado anterior es un procedimiento que se realiza por técnica artroscópica, es decir introduciendo una cámara en la reconstrucción de la rodilla y un instrumental específico para poder realizar la cirugía.
Una vez obtenido el injerto para realizar nuestro nuevo ligamento (ligamentoplastia), la cual precisa de una pequeña cirugía abierta, determinaremos el tamaño (diámetro) de nuestro nuevo ligamento, es decir del injerto.
En primer lugar al introducir la camara en la rodilla, se realiza una inspección de la articulación para buscar lesiones asociadas, muy comunes en las roturas de ligamento cruzado anterior. Las más habituales son las lesiones meniscales y condrales.
Nuestro nuevo ligamento se fija en nuestra rodilla mediante unos túneles óseos, uno realizado en el fémur y otro en la tibia, de tal forma que la localización de dichos túneles es fundamental para un buen resultado, por ello es muy importante que la operación de ligamento cruzado anterior la lleve a cabo un especialista en rodilla.
En segundo lugar con la cámara dentro de la rodilla y un instrumental especial el cirujano buscará la localización certera donde realizar el túnel femoral, introduciendo una aguja a través de una guía específica para este paso. Una vez comprobada que la localización de la guia es la correcta, se procederá a realizar el túnel óseo con una broca especial guiada a través de la aguja, del diámetro del injerto.
Este segundo paso se repite en la tibia, con su guía correspondiente. Una vez realizado ambos túneles en tibia y fémur, introduciendo nuestro injerto por ellos. Para mantener nuestro injerto en su posición con la tensión adecuada hasta que cicatrice,existen distintos sistemas,